daddy , banana puyrredon y la mirada de mis hijas

Ayer fuimos con mis hijas y mi sobrina al concierto de daddy yankee , un idolo adolescente y no tanto, de la musica que actualmente escuchan mis hijas. Una vez mas pude comprender en segundos o minutos la felicidad de poder compartir la mirada , las risas, los gritos y los bailes de estas nenas, que estaban desorbitadas de admiración y sorpresa , por la proximidad del escenario , del cantante, las luces, la musica , la gente . Vi los nervios por llegar tarde, sus ansias por que empezara, la emocion de la primer canción, la ingenuidad de creer que las "miraba" , su preocupación porque alguno fumaba algo con feo olor, de como iban vestidas algunas ...
Mi sobrina nunca habia ido a un recital, estaba nerviosa y temblaba , cuando empezó el espectáculo ,no paraba de gritar y reirse con sus primas, quienes entre ellas se tienen un gran, pero gran cariño.
Las miraba de atras, y me emocionaba, si a pesar de Daddy y su "llamado de emergencia " me emocionaba por poder darles esa felicidad, y ademas compartirla como una mas, porque baile y grité igual que el resto . Lo mismo me pasó hace un tiempo con "casi angeles" otros idolos, pero la misma felicidad, ellas cantaban y a mi se me caian las lagrimas cuando les miraba esa cara de admiración imposible de describir. En ese recital salimos enfocadas en la pantalla grande, menos mal que no sali llorando ¡¡¡¡
No crean que estoy mal de la cabeza,( bueno algo suelto puede haber ) estoy convencida que eso se llama amor, felicidad, dicha, orgullo y agradecimiento.
Ademas sin "querer queriendo " recuerdo y comparo con mis 12 y Florestas años, donde lo maximo que vivi fue un baile en el country de la floresta ( lo mas top y caro del balneario, o sea inaccesible para mi ) donde como invitados especiales, tocaban BANANA .... un amigo de mi padre nos llevo sin pagar a mi y a mi hermana, y si bien eramos sapos de otro pozo , fue como ver a Madonna , ahora a mis 40 ¡¡, mamá no estaba, fuimos solo nosotras dos. No recuerdo muchos eventos de esta naturaleza compartirlos con mi madre ( por supuesto que otros si ) . Que feliz me voy a sentir cuando no este, pero igual las escuche conversar y recordar lo bien que la pasabamos juntas cuando las llevé a ver sus primeros recitales.
Nada , nada se compara con esta bendición, agradezco a la vida , y a Dios por este regalo.